A veces dicen que has cambiado, que ya no eres el mismo, que la sonrisa de tu rostro se ha desaparecido y culpan a tu otro yo de hacerle esto a tu estado, pero solo se dedican a presionar y a formar opiniones infundadas.
La realidad es que no estas solo y que si has cambiado, no es por culpa de otra persona mas que tu, tus intereses están siendo distintos y ya no deseas estar saltando de ahí para acá, si no que lo que quieres es estar sentado, con un cigarrillo en una mano, un libro del cual aprender entre tus piernas y hacer cariño a tu otro yo con la otra mano.
Ya no eres el mismo, has dejado de lado tu interés reformista imposible y extremista y lo has cambiado para venderte al sistema y tener una idea de reforma constructiva que haga que todos canten en comunión con un mismo fin
Las cosas cambian y las frutas maduran.